Un aneurisma es, por definición, una dilatación localizada y persistente de una arteria, a menudo causada por aterosclerosis. La corrección de un aneurisma puede prolongar la vida al evitar que se produzcan otras complicaciones. En este sentido, la indicación quirúrgica busca ser profiláctica, evaluando el riesgo/beneficio del procedimiento, y su decisión depende de los diámetros transversales de la aorta, del grado de dilatación del saco aneurismático, de la forma y del segmento afectado. Según Silva (2008), el procedimiento de BENTALL ha demostrado ser muy eficaz en el tratamiento a largo plazo de las enfermedades que afectan a la raíz aórtica, ya que el 87,17% de los pacientes seguían vivos 10 años después de la operación, el 95% de los cuales se encontraban en buen estado general sin ningún signo de disnea o limitaciones debidas a la cirugía. Esta investigación fue dirigida por la Dra. Marines Bertolo Peres, Especialista en Cardiología, que recogió datos sobre los procedimientos quirúrgicos realizados por el Dr. Esp Leonardo Lacava Lopes, Especialista en Cirugía Cardiovascular, y su equipo, en el centro de cardiología del Hospital Regional de São Paulo, en Xanxerê, Santa Catarina, Brasil.