La razón detrás de esto es que cuando un conductor está conduciendo un vehículo, el área alrededor del vehículo no puede ser observada directamente por el conductor. Hay algunos casos en los que cuando otro vehículo se aproxima a un adelantamiento, el punto ciego del espejo retrovisor no puede detectar el vehículo y estos puntos ciegos son el origen de múltiples accidentes. Para reducir la colisión lateral en los vehículos pesados hemos ideado la solución llamada Blind spot Detection. Este sistema funcionará según el principio de los ultrasonidos haciendo que el conductor esté alerta mediante la tecnología del tacto háptico. Este tipo de tacto háptico da una especie de sensación en la mano mientras se sostiene el sistema de dirección. De este modo, el conductor se da cuenta de que hay un vehículo en la zona del ángulo muerto sin distraerse con el espejo retrovisor. Este sistema es supervisado y activado por un sistema electrónico basado en sensores que vigila la presencia de obstáculos y alerta al instante al circuito controlador que, a su vez, acciona el micro vibrador. Finalmente, el resultado es que el volante vibrará invocado con el tacto háptico y así el conductor puede entender la presencia del vehículo en el punto ciego sin perder la concentración en la carretera.