El surgimiento de una nueva filosofía y odontología basada en la prevención en lugar de la reparación y el reemplazo ha sido uno de los desarrollos más significativos en la historia de la odontología. La creciente preocupación por la salud y la calidad de vida ha alentado a las personas a adoptar estilos de vida saludables, una combinación de instrucciones de higiene bucal, limpieza dental profesional mecánica y química a intervalos adecuados puede prevenir casi por completo el desarrollo de la formación de placa, caries dental y enfermedades periodontales. La caries dental es una enfermedad infecciosa, en la que el azúcar presente en la placa junto con las bacterias cariogénicas pueden producir la enfermedad en determinadas condiciones ambientales. Por lo tanto, existe un interés creciente en el uso de agentes edulcorantes que confieren dulzura pero que son más seguros para los dientes. Los sustitutos del azúcar juegan un papel importante en cambiar el proceso de caries a favor del mantenimiento de la salud dental. Por lo tanto, los trabajadores de la salud bucal deben persuadir y educar a sus pacientes para que adopten programas dietéticos especiales seguidos del mantenimiento de una buena higiene bucal por medios profesionales mecánicos y químicos.