El diseño de sonrisas no tenía en cuenta las irregularidades naturales y las desviaciones aleatorias de la norma que contribuyen a la individualidad y belleza de la sonrisa de una persona. La mayoría de las sonrisas bellas y naturales no son necesariamente simétricas, de color uniforme o perfectas según los estándares científicos. En consecuencia, mantienen una belleza intrínseca natural no por la virtud de la perfección, sino más bien por la sutil belleza de la imperfección. Por estas razones, las directrices de diseño de sonrisas que utilizan un modelo perfecto como objetivo no necesariamente producen la sonrisa más bella y natural que satisface tanto al dentista como al paciente.La elaboración de una sonrisa ideal requiere análisis y evaluaciones de la cara, los labios, los tejidos gingivales y los dientes y una apreciación de cómo aparecen colectivamente. Una sonrisa ideal depende de la simetría y el equilibrio de los rasgos faciales y dentales. El color, la forma y la posición de los dientes forman parte de la ecuación. Reconocer que la forma sigue a la función y que los dientes anteriores desempeñan un papel vital en la salud oral del paciente es primordial. Utilizar un enfoque integral para diagnosticar y planificar el tratamiento de los casos estéticos puede ayudar a conseguir la sonrisa que mejor se adapte a sus necesidades.