El objetivo de este libro es reflexionar sobre el concepto de estabilización en la clínica de las psicosis desde la perspectiva del psicoanálisis. Este concepto difiere radicalmente de la noción de estabilización en sentido común, que transmite una cierta idea de armonía, de equilibrio. Una persona, un entorno, una situación estable es aquella en la que hay poco ruido, poca agitación, poco movimiento. La experiencia clínica cotidiana nos muestra que ésta no es en absoluto una característica de los sujetos psicóticos, sino todo lo contrario. La propuesta de estabilización aquí desarrollada pretende discutir otra idea. La de la búsqueda del sujeto por inventar una relación posible con el Otro y con el cuerpo, a partir de esa experiencia afirmativa, explosiva, abierta, que es la experiencia psicótica. Una relación que permita al sujeto psicótico ser menos invadido por el Otro y más insertado en el lazo social. Esta inserción nunca ocurrirá tratando de introducir al psicótico en la norma fálica, de convocarlo a estar dentro de las normas sociales y de los estándares culturales. Sino en la apuesta de que, desde dentro del poder disruptivo de la experiencia psicótica, sea posible para estos sujetos no vivir en el universo de la exclusión social sino dentro del lazo social.