Ayudado por dos de sus fieles seguidores -Carmaux y Van Stiller-, el Corsario Negro rescata el cadaver de su hermano a quien le da honrosa sepultura en el mar. Jura, entonces, no descansar hasta vengarse de Van Guld, exterminandolo a el y a toda su familia. Cuando inicia sus proezas para cumplir su juramento, aborda a una nave espanola, aprisionando a sus pasajeros, encontrando entre estos una hermosa joven noble, de la que se enamora sin confesarselo a si mismo. Al final, el destino del Corsario Negro -como el de todos sus hermanos- es tragico. Luego de tomar por asalto a Maracaibo, en persecucion de Van Guld, descubre que este es el padre de su amada. Pero como ha jurado exterminar a la familia de su enemigo, sacrifica su amor y a la joven a su juramento. Aunque la prosa de Salgari nunca llega -en estilo y sutileza- a la altura de escritores como Walter Scott, Victor Hugo, Alejandro Duma padre, y aun de Julio Verne, por lo menos es amena y llena de suspenso. Es una prosa cabalgante que nunca decae."