Napole n I, cuya carrera militar tuvo las caracter sticas de un duelo contra toda Europa, desaprobaba los duelos entre los oficiales de su ej rcito. El gran emperador militar no era nig n espadach n y sent a poco respeto por la tradici n. A pesar de eso, una historia de duelo, que acab convirti ndose en leyenda militar, recorri la epopeya de las guerras napole nicas. Para sorpresa y admiraci n de sus camaradas, dos oficiales, como artistas enloquecidos que pretendieran refinar el oro puro o rizar el rizo, mantuvieron una disputa particular durante aquellos a os de matanza generalizada. Joseph Conrad, El duelo.