La Estrategia para el Desarrollo de la Integración Económica Euroasiática hasta 2025 enumera entre los principales objetivos la continuación de la formación del marco contractual y jurídico de la Unión Económica Euroasiática con terceros países y sus asociaciones de integración sobre la creación de regímenes comerciales preferenciales para el desarrollo y la profundización de la cooperación comercial y económica. De hecho, la intensificación de la cooperación económica con países extranjeros y organizaciones internacionales en los próximos cinco años debería convertirse en una de las áreas más importantes del desarrollo de la unión, lo que permitirá trabajar de forma coordinada en cuestiones de conjugación de los procesos de integración en el espacio euroasiático. Al mismo tiempo, sus actividades internacionales se centrarán en la resolución de problemas tan acuciantes como el desarrollo de las exportaciones, las infraestructuras de transporte y energía, la cooperación industrial, la introducción de nuevas tecnologías y la creación de condiciones para la entrada conjunta de las empresas de los Estados miembros en los mercados del sudeste asiático, Oriente Medio, la región indopacífica, el norte de África y el continente latinoamericano. ¿Cómo se afrontan estos retos en la actualidad? La respuesta está en este estudio.