EL PAIS DE LA CIGUARAYA Escribir, llegada cierta edad, una autobiografia o unas memorias, es una tentacion recurrente y legitima, como lo es el deseo de salvar lo vivido y el modo de mirarlo. Es decir el deseo de salvarse uno mismo, sabiendo lo dudoso y aun irrisorio del intento. Aqui no se pretende hacer literatura, sino solo contar. El interes esta en lo que se cuenta, acentuado a veces por el vinculo del autor con los hechos que refiere. Cabe pues subrayar el interes del libro: se trata de situaciones y hechos de toda una epoca vividos por el autor en su pais, Cuba. Hacia estos hechos miraba una parte importante del mundo, claro que desde fuera - algunos aun los miran asi - y a traves de los mas variados cristales. El autor en cambio los vivio intensamente desde una adolescencia febril, fue uno de esos "protagonistas anonimos," tan mencionados por entonces. Con la ventaja de ser su contemporaneo y coterraneo, subrayo su honradez, tanto en la fidelidad a los hechos que cuenta como en su transparente actitud critica: ni distorsiona a conveniencia los hechos, ni enmascara su parcialidad al interpretarlos. No finge una olimpica neutralidad, por demas imposible. Y lo que cuenta - aquello que mas proximo le resulta de esas largas y nutridas decadas -, es sustancial y contundente para cualquiera que no sea indiferente a esta historia. Una historia con sangre del cuerpo y del espiritu, como casi todas las que acaban siendo memorables. Aramis Quintero."