Los esfuerzos de las catástrofes deben examinarse no sólo en términos técnicos y científicos, sino también en términos humanitarios, sociales y económicos. Los medios de comunicación pueden desempeñar un papel importante en este sentido. Su contribución a la educación sobre las catástrofes debe adoptar la forma de promoción de la conciencia nacional sobre las catástrofes y deben esforzarse por evocar el interés por la mitigación sistemática de las catástrofes en la comunidad y los organismos que participan en su gestión. Los medios de comunicación también podrían servir de plataforma para compartir información entre el puñado de miembros de la comunidad científica y el público en general. Los complejos fenómenos científicos podrían explicarse en un lenguaje fácil a través de los ojos del hombre común y su vida cotidiana.