El paciente Adri n quiso contar su historia "para ayudar a los que sufren y se sienten mal, y se animen a buscar un psicoterapeuta que les ayude". Yo lo brindo a los terapeutas que, como yo, est n deseosos de ayudar. Es la historia psicol gica de Adri n, que organiza su conducta en forma de c rculos viciosos que se retroalimentan, formando un patr n relacional de comportamiento que deriva en experiencias de dolor y frustraci n. l se ala su problema: "Hay en mi una parte emocional no asentada, que provoca reacciones adversas y no s como cambiarlo, me siento no v lido, enfadado, con p nico y triste. Una segunda parte muestra su evoluci n: est menos vulnerable, auto-regula sus emociones, es due o de su vida y va pudiendo entender y reflexionar sobre c mo su trauma qued grabado en su cerebro, en su mente y en su cuerpo, tal como afirma Van der Kolk, y como se sabe actualmente gracias a las aportaciones de la neurociencia. Los dos, paciente y terapeuta, hemos ido de-construyendo viejas formas de su patr n relacional, y construyendo simult neamente modos de aprender a estar con los otros de forma m s integrada y flexible. Los datos que aparecen sobre Adri n son ficticios