La calidad del agua usada para regar complementariamente maíz, soja y trigo en 180.000 ha de suelos pampeanos, altera el balance edafosalino. (Génova, 1993) propuso un modelo conceptual del control natural salino-sódico de suelos regados y cuantificó la resistencia (RT) y la resiliencia (RL) a cambios en sus propiedades químicas por riego (Génova, 2003). Para garantizar la sustentabilidad de los agroecosistemas regados, entre 1985 y 2005 se muestrearon en pre (Pret) y postemporada (Post) de riego, Molisoles que recibieron aguas ricas en HCO3Na, midieron pH, CEex y PSI y compararon con valores de secano. Se halló un patrón de variación de los datos donde los correspondientes a Post siempre superaron a los de Pret, pero sin una acumulación que alcanzase valores críticos que comprometan la calidad del suelo. El lavado de sales por las lluvias disminuyó la CEex y el PSI decreció por intercambio catiónico. El comportamiento de los agroecosistemas se explicó con balances hidrosalinos y con la evaluación de RT y RL edáficas. El análisis de 5.000 datos colectados durante 20 años, permitió concluir que el sistema de manejo agroproductivo bajo riego complementario es sustentable.