Desde enero de 2012, Burkina Faso acoge en su territorio a refugiados malienses en SAG-NIONIOGO/Pabré, a raíz de la crisis en ese país. La protección de los refugiados está garantizada gracias a la intervención multisectorial de varias organizaciones que trabajan a diario para satisfacer las necesidades de los refugiados. Se han construido numerosas infraestructuras de agua y saneamiento. Para abordar los problemas de higiene y saneamiento, se han construido varias infraestructuras en el lugar. La sensibilización sobre la promoción de la higiene llevada a cabo por la Cruz Roja ha permitido a los refugiados conocer las normas de higiene, en particular la gestión de las letrinas, las zonas de lavado, el agua y la prevención de las enfermedades oro-fecales.