La competencia comercial obliga cada vez más a las empresas de almacenaje a utilizar sistemas SGA (Sistemas de Gestión de Almacenes), de forma que sean más eficaces en la gestión de los recursos, ya sean financieros, materiales, humanos y de tiempo. Para las empresas de la industria de almacenamiento y distribución, actualmente mantener un stock sin rotación de productos significa pérdida porque se trata de una inversión de capital que hasta su momento de venta estará generando un costo de almacenamiento que impacta directamente en la ganancia de la empresa. El uso de tecnologías amigables con la operativa diaria puede facilitar la gestión del almacenamiento indicando puntos cruciales como el stock mínimo, el stock máximo, la ubicación interna de los productos, la integración directa con los socios, etc. Esta información puede ayudar a los sistemas de gestión del SGA a adoptar estrategias de distribución o venta más ajustadas a la situación real del mismo para evitar pérdidas comerciales consiguiendo mantener el valor añadido al producto en lugar de perderlo por el coste de almacenarlo.