La Policía Nacional Congoleña es un instrumento creado por el Estado para luchar contra la delincuencia. En el lenguaje jurídico congoleño, se trata de actos susceptibles de perturbar el orden público. Entre las actividades humanas que atentan contra el orden público y que, por tanto, requieren la intervención de la policía, figuran las infracciones cometidas a través del ciberespacio. Se trata de nuevas infracciones que requieren medios humanos, financieros y materiales, así como conocimientos especializados, para combatirlas. En la República Democrática del Congo, la policía parece más preocupada por los delitos tradicionales, que ignoran felizmente la dimensión virtual. Es cierto que se han realizado algunos progresos, pero siguen estando muy por debajo de lo que está en juego y de los retos asociados a este cambio. Este diagnóstico ha motivado el presente estudio, que pretende no sólo examinar los esfuerzos realizados por el Estado congoleño en este ámbito, sino también y sobre todo las inmensas limitaciones que requieren medidas correctoras para afrontarlas eficazmente.