El principio de especialidad ha sido durante mucho tiempo una regla fundamental de las finanzas públicas. Aplicado en Camerún desde hace varias décadas, se ha ido quedando tan obsoleto como el sistema financiero en el que se basaba. Con el fin de mejorar la gestión de las finanzas públicas camerunesas, la ley 2007/006 sobre el sistema financiero del Estado introdujo el presupuesto por programas. Posteriormente fue reforzado por la Ley N°2018/012 sobre el régimen financiero del Estado y otras entidades públicas. A partir de entonces, era una obviedad que esta introducción formal del presupuesto por programas en el corazón de la gestión de las finanzas públicas trastocaría su estructura y sus fundamentos, en este caso la naturaleza especial de los créditos presupuestarios. Del esbozo de este análisis se desprende que, bajo sus nuevos colores, el principio de especialidad parece haberse transformado sustancialmente.