El cambio climático siempre se ha producido en la Tierra, pero su rápido ritmo y la importante magnitud que está alcanzando en la actualidad son motivo de gran preocupación. El cambio climático se produce como resultado de un desequilibrio entre la radiación entrante y saliente en la atmósfera. El calentamiento global asociado al cambio climático difiere del calentamiento pasado en su ritmo. Se prevé un aumento de la temperatura media mundial de hasta 5,4 °C de aquí a 2100. Hay pruebas abrumadoras de que las actividades humanas han contribuido al cambio climático en el último siglo, mientras que los cambios en la actividad solar y las erupciones volcánicas han desempeñado un papel menor. En las últimas décadas, el ser humano ha transformado a gran escala los sistemas naturales, provocando una acumulación neta de dióxido de carbono en la atmósfera. El cambio climático está reconocido como una grave amenaza para los ecosistemas, la biodiversidad y la salud. La adaptación a las consecuencias del cambio climático y la prevención de su agravamiento son retos fundamentales para la sociedad.