La miel se ha utilizado en la civilización humana desde la época prehistórica, como se menciona en la literatura religiosa. La miel es un producto alimenticio rico en nutrientes y consumido por las poblaciones humanas de todo el mundo. La miel goza de una gran estima, sólo superada por la Ambrosía. Aunque se ha utilizado como medicina desde la antigüedad, al principio sólo se sabía que era un remedio eficaz. Ahora se ve que la eficacia de la miel en muchos de sus usos médicos se debe a su actividad antibacteriana. La miel se produce a partir de muchas fuentes florales diferentes y su actividad antimicrobiana varía según el origen y el procesamiento. El Ayurveda (medicina india) describe la miel como el néctar de la vida y recomienda su uso en diversas dolencias. Existe un renovado interés por el tratamiento con miel, como demuestra el número de informes que aparecen en la literatura científica. La miel ha sido útil en el tratamiento de heridas quirúrgicas, quemaduras y úlceras de decúbito. Las propiedades antibacterianas y antifúngicas de la miel están bien documentadas.