Se ha constatado que la universidad argelina tiene actualmente problemas con la formación de sus profesores universitarios. Podemos preguntarnos por qué los profesionales y, sobre todo, los investigadores no han encontrado aún una solución a este espinoso problema. La respuesta no es fácil de dar, pero es posible señalar algunas razones fundamentales que explicarían, en parte, las dificultades encontradas en el surgimiento y desarrollo de la formación del profesorado universitario. Ciertamente, podemos afirmar que los profesores experimentados aprenden de la experiencia, mejoran con los años y acaban construyendo una forma de saber hacer didáctico y pedagógico, a pesar de su desconocimiento de las ciencias de la educación. Sin embargo, aunque el dominio de los contenidos es un requisito previo esencial, los profesores principiantes se darán cuenta rápidamente de que, una vez que se enfrenten a una "clientela heterogénea", se requerirán además otras cualidades.