Los diseñadores siempre tienen que saber cuáles son las directrices del proceso de diseño arquitectónico que deben seguir para satisfacer las necesidades de sus clientes. De nada sirve diseñar una magnífica estructura que se ajuste a las instrucciones del cliente, con un gran talento artístico, pero que resulte inviable desde el punto de vista técnico para el cliente. Una vez que el diseñador ha conjugado los elementos de diseño con los requisitos técnicos adecuados, empieza la parte divertida del diseño. El diseñador pasa por un proceso de diseño arquitectónico de planos de croquis, planos de diseño finales a partir de los cuales se crean modelos tridimensionales para una mejor visualización del proyecto previsto, se elabora la orientación del edificio o su posición con respecto al sol, las vistas estéticas, el acceso a la propiedad, etc. Este libro es una fuente de inspiración tanto para estudiantes de arquitectura como para arquitectos en ejercicio en su búsqueda de un proceso metodológico de diseño de proyectos arquitectónicos ambicioso y actualizado, ya que todos los diseñadores se enorgullecen de haber diseñado y construido edificios empleando un proceso metodológico de dibujo de diseño tan científico y bien secuenciado.