En esta obra, Jung aboga por una revaluaci n del simbolismo de la alquimia como ntimamente relacionado con el proceso anal tico. Utilizando una serie de sue os de uno de sus pacientes, muestra c mo los s mbolos utilizados por los alquimistas acontecen en la psique como parte del dep sito de im genes mitol gicas aprovechadas por el individuo en sus estados de sue o. Jung dibuja una analog a entre la Gran Obra de los alquimistas y el proceso de reintegraci n e individuaci n de la psique en el paciente psiqui trico moderno. Al se alar estos paralelismos, Jung refuerza el car cter universal de su teor a del arquetipo y hace un apasionado argumento a favor de la importancia de la espiritualidad en la salud ps quica del hombre moderno. Profusamente ilustrado con im genes, dibujos y pinturas procedentes de la alquimia y otras fuentes mitol gicas entre ellas el cristianismo, el libro es otro ejemplo de la erudici n de Jung y de su fascinaci n con expresiones de espiritualidad tanto esot ricas como exot ricas, como asimismo de la psique en la religi n y en el misticismo.