Nacido de la melancolía y la desesperación, el estadio ético de Søren Kierkegaard es el grado más elevado de la existencia. Intermedio entre los estadios estético y religioso, representa la alternativa a la que se expone el individuo a medida que toma conciencia de sí mismo. La reflexión sobre la existencia se profundiza y conduce al hombre al autoconocimiento para encontrar una verdad propia. Estrechamente vinculada a la noción de subjetividad, la esfera ética interpela al individuo en su relación con el mundo y le empuja a replantearse sus relaciones sociales y sus medios de comunicación. En este libro, Nadine Sarah explora esta etapa ética analizando sus diferentes explicaciones, ofreciendo una representación visual, pero también relacionándola con las opciones vitales de este gran pensador danés. Al mantener todas las interpretaciones en la incertidumbre, Nadine Sarah respeta a lo largo del libro la distancia con la subjetividad de cada una.