El exceso de mortalidad parece estar asociado a la artritis reumatoide, con una reducción de la esperanza de vida de entre 5 y 10 años. Varios estudios han destacado recientemente el predominio de los episodios cardiovasculares en el exceso de mortalidad asociado a la artritis reumatoide, y actualmente se considera que la aterosclerosis es un proceso inflamatorio. Este último es similar al observado en la artritis reumatoide. Otras explicaciones podrían explicar este riesgo, además del síndrome inflamatorio, está la mayor prevalencia de factores de riesgo cardiovascular, el efecto deletéreo de los tratamientos, la menor prevención de las enfermedades cardiovasculares en los pacientes con artritis reumatoide.Todos estos factores hacen necesaria la búsqueda de situaciones de alto riesgo y de los factores de riesgo responsables de las mismas. Para ello, se recurrirá a sujetos asintomáticos para la prevención primaria y a poblaciones específicas para la prevención secundaria.