Esta novela, atravesada por las nuevas tecnologías de la información y la comunicación, aborda con virtuosismo la estética novelística. Intermedialidad e intertextualidad interactúan a través de la televisión, el teléfono, el vídeo y las redes sociales de Internet como Facebook, Twitter, WhatsApp, Linkedln, Yahoo, a las que se añaden alusiones literarias. Los medios de comunicación permiten al narrador evocar varios temas a través de los recuerdos de los personajes. Al situar la novela en un escenario imaginario, el narrador trata los problemas contemporáneos con humor trágico e ironía. La historia de los pensionistas miserables encuentra eco en los jóvenes desorientados por la precariedad, el paro, las inundaciones, la inflación, el sistema penitenciario, la demagogia y la mala gestión, que recurren al bandidaje y a la inmigración clandestina con la amenaza de la burocracia administrativa, los contrabandistas, el terrorismo y las nuevas formas de esclavitud. Este original libro trata también del amor, los mitos y la esperanza a través de las saludables iniciativas de unos personajes que piensan que la tierra de la leche y la miel es una ilusión del topos. Cada cual puede hacerla suya.